La tecnología es hoy para los gobiernos mucho más que un habilitador que les permite acercarse a sus ciudadanos, mejorar su gestión y ser más eficientes.
Hoy el término Gobierno Digital es cada vez más frecuente. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) lo define como el “uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones en el marco de las estrategias de modernización para crear valor público en un ecosistema 100% digital, donde participan actores como el gobierno, organizaciones, empresas, asociaciones y ciudadanos que apoyan la producción y acceso a datos, servicios y contenidos a través de la interacción con el gobierno”.
Aunque hoy no podemos hablar de ecosistemas 100% digitales en gobiernos, si hay grandes avances y muchos aprendizajes. En este sentido, la OCDE ha identificado cinco pilares para una implementación exitosa de un Gobierno Digital:
- Identidad y firma digital. Los gobiernos deben ofrecer a sus ciudadanos un sistema de identidad, así como una firma digital que tenga el mismo valor en plataformas digitales que los que usamos en el mundo físico (documento de identificación oficial y firma autógrafa); es decir que sean intransferibles, de aceptación universal, confiables y con validez jurídica.
- Interoperabilidad. Además de lograr que los ciudadanos puedan realizar todos los trámites a distancia y que no deban presentar ningún documento físico para ello, es fundamental para un gobierno digital que sólo tengan que registrar sus datos una vez, y que esa información sea compartida por todas las instancias de gobierno en el momento que la requieran.
- Uso eficiente de los datos. La estandarización y una eficiente gobernanza de los datos permite a los gobiernos conocer a sus ciudadanos, entender y satisfacer sus necesidades. Pero es fundamental que esos datos sean explotados y regulados rigurosamente, de manera que se garantice su uso responsable y el resguardo que amerita una información tan sensible.
- Servicios digitales. También en el gobierno digital, el ciudadano debe ser el centro, y cada trámite debe ser fácil de realizar. De hecho, entre las mejores prácticas se recomienda centralizar la mayor cantidad de trámites posible en un portal único y de ser posible que el ciudadano cuente con una carpeta o espacio en donde pueda acceder a todos sus registros, realizar nuevos trámites o ver lo que tiene en curso.
- Ciberseguridad: La naturaleza sensible y confidencial de la información que los ciudadanos comparten al realizar sus trámites y la criticidad de los datos que recopila el Gobierno, justifican que los sistemas de almacenamiento y resguardo de la información sean tan robustos como sea posible, de manera tal que se establezcan estrictos controles para su manejo y acceso además de garantizar el mayor nivel de protección ante eventuales ciberataques.
Algunos ejemplos de buenas prácticas de gobierno digital
Estonia es considerada la primera nación digital del mundo y es referente para quienes gestionan gobiernos, pues lo que inició con su independencia de la Unión Soviética en 1990 como una iniciativa para desarrollar la educación digital y mejorar el acceso a las tecnologías de la información a sus ciudadanos, en la actualidad ha logrado que el 99% de los servicios que ofrece el Estado estén online y el 98% de los ciudadanos cuente con un ID digital.
Sin embargo, alrededor del mundo existen ejemplos muy interesantes de implementación de iniciativas de gobierno digital y muchas organizaciones que se dedican a monitorearlos y apoyarlos, entre las que destaca la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, que en 2019 publicó el Índice de Gobierno Digital OCDE 2019.
En este informe se indica que entre los países con mejor desempeño digital se encuentran Corea, Reino Unido, Colombia, Dinamarca, Japón y Canadá. ¿La razón?, se han preparado para desarrollar herramientas de confianza digital que mejoran la calidad de vida de los ciudadanos, satisfacen sus necesidades e integran los sistemas que funcionan con una identidad o cédula digital; de forma transversal, lo que permite minimizar la brecha digital y mitigar los riesgos por usurpación de identidad.
Destacamos el caso de Dinamarca, con una iniciativa de gobierno digital en marcha desde 2016, enfocada en centralizar los servicios al ciudadano. El proyecto, consistió en crear una infraestructura central de TIC disponible para que instituciones de gobierno (nacionales, locales y municipales) y empresas con iniciativas digitales interactúen con los ciudadanos. En la práctica, los daneses desde una única página web «borger.dk» pueden realizar trámites tan diversos como solicitar la emisión de un pasaporte o agendar una cita en la peluquería.
En el continente americano, Canadá, es de los países que más ha innovado en su modelo de gobierno digital, el cual se enfoca en optimizar la experiencia del usuario, mejorar la transparencia en la información, sumar nuevas tecnologías como el Blockchain para hacer más eficiente los procesos y diseñar nuevas propuestas que ayuden al país a ser más competitivo.
El objetivo del gobierno de Canadá de digitalizar al país se comenzó a implementar en el año 2,000 con la creación del portal GOL (Government OnLine), después se modificaron los marcos legales y finalmente se inició la digitalización de cada sector. Hoy los ciudadanos cuentan con dos plataformas que centralizan información de valor:
- Canada.ca: en donde se concentran todos los trámites e información de sus instancias de gobierno.
- Open.canada: concentra información gubernamental y datos abiertos que son colocados a disposición de los ciudadanos.
México, ¿Cómo vamos en materia digital?
Aunque aún hay muchas tareas pendientes, como es el caso de una Identidad Digital Única, también hay avances importantes en servicios digitales de gobiernos para ciudadanos.
Destacamos la creación de la Ventanilla Única Nacional para los trámites e información de gobierno creada en 2015 por Decreto Presidencial la cual en su sección de trámites ofrece al ciudadano información y documentos para realizar más de 800 tipos distintos trámites en un mismo lenguaje y bajo el estándar de servicios digitales del Gobierno.
En 2019, se creó en la Ciudad de México de la Agencia Digital de Innovación Pública, cuya misión es unificar estrategias y acciones del gobierno de la ciudad en el ámbito de la tecnología, datos públicos y la conectividad para controlar el ejercicio de gobierno y fortalecer a la ciudadanía. Entre sus logros está la centralización de la información para ciudadanos sobre requisitos y procedimientos para realizar más de 600 trámites.
Desde 2004, el Servicio de Administración Tributaria creó la e.firma, un certificado digital que por sus características y los datos que incluye (información biográfica y biométrica) permite acreditar y garantizar la identidad única de personas físicas y morales.
Con la e.firma, es posible firmar documentos electrónicamente, pues tiene la misma validez que una firma autógrafa y actualmente es utilizada para identificar a los ciudadanos al momento de realizar más de 400 trámites o servicios en 20 dependencias de gobierno, algunas instituciones públicas y privadas, como los trámites para la cédula profesional, atender avisos aduanales, exportación de arte o joyería, entre otros.
