La identificación digital ofrece a las personas beneficios sociales, cívicos y políticos, desde una mayor inclusión, formalización y transparencia.

Hemos sido testigos de un cambio importante en estos meses. La pandemia nos enseñó que la tecnología es un aliado importante cuando se trata de brindar a los ciudadanos herramientas para trabajar, facilitar el acceso a servicios y hasta para comunicarnos con familiares y amigos de manera fácil y segura.   

En este escenario, se hace evidente la necesidad de contar con una identidad digital confiable, que permita a las personas disponer y acceder a servicios, educación, conectividad e interactuar con empresas gubernamentales, privadas o financieras con tan sólo un clic desde cualquier parte del país.

De acuerdo con datos del estudio “Digital identification: una llave para el crecimiento inclusivo” de McKinsey, países como Brasil, China, Etiopía, India y Nigeria, al implementar una buena identidad digital generaría un valor económico que varía del 3% al 13% del PIB. 

De igual forma, esto se puede lograr si los ciudadanos cuentan con un documento de identidad que sea posible utilizarlo en un entorno digital para acceder a  servicios brindados por el Estado y productos que ofrezcan la iniciativa privada. 

La implementación de un sistema de identidad digital facilitaría para el gobierno y ciudadanos, por ejemplo, la distribución transparente de beneficios sociales, realización de trámites en línea, acceso a emprendedores y trabajadores informales a servicios financieros entre otros,  de acuerdo con el informe de McKinsey. 

Cabe destacar que en México, el 94% de la población cuenta con un documento de identificación; a nivel global, de acuerdo con datos recopilados de la ID4D, en el estudio de McKinsey, a nivel global cerca de 6 mil 600 cuentan con un documento oficial que acredite su identidad, sin embargo, más de la mitad, no pueden hacer uso efectivo de ello  en los diferentes ecosistemas digitales actuales. 

Según explicó José Vázquez Ortega, Presidente del Consejo de Administración de Acerta Computación Aplicada, el impacto de la implementación de un sistema de identificación digital, es significativamente alto en países que aún no cuentan con un documento que les permita acreditar su identidad en plataformas digitales de manera confiable.

En el estudio de McKinsey, se recopilan datos que permiten demostrar que la implementación de sistemas de identidad digital avanzada digital tiene el potencial de liberar valor para la economía del país; por ejemplo, en el caso de la India, en donde actualmente se cuenta con un sistema de identidad digital (UIDAI)  sería entre 4% y 6% de PIB (USD 273 a USD 409 mil millones), al permitir la reducción de la brecha crediticia (aumento de la bancarización), formalización de contratos y eficiencia en trámites gubernamentales. 

En América Latina, Brasil es el país con mayor potencial de crecimiento de su PIB a partir de la integración de un sistema de identidad digital avanzado, pues un porcentaje pequeño de población (211 millones) cuenta con un documento oficial que acredite su identidad en plataformas digitales. En este caso, el impacto de su implementación sería mayor entre 8% y 13% de PIB (USD 213,5 a USD 347 mil millones).

“Los programas de identificación digital que liberan valor requieren un diseño cuidadoso, una infraestructura adecuada y un gobierno bien controlado, al mismo tiempo que abordan el riesgo” afirmó José Vázquez Ortega. 

Recalcó que una buena identidad digital avanzada debe permitir a las personas y proveedores de servicios interactuar con mayor facilidad y seguridad para realizar procedimientos o trámites, por ejemplo:   

  1. Consumidores

Permite a las empresas hacer uso de plataformas digitales para facilitar la venta de sus productos y mejorar la experiencia del cliente a partir de aplicaciones para realizar transacciones y pagos de forma rápida y segura.

  1. Trabajadores

 Realizar trámites en línea y obtener información sobre su condición laboral como datos del seguro social  y créditos del infonavit, por ejemplo. 

  1. Microempresarios

Acceso a información y la posibilidad de realizar en línea trámites de registro, transacciones financieras, acceso a créditos y apoyos de gobierno entre otros.  

  1. Contribuyentes

Simplificación de procesos de alta como contribuyentes, declaraciones de impuestos y la posibilidad de realizar todos los trámites relacionados con obligaciones fiscales y tributarias en línea.

Hoy en día, aún hay un largo camino por recorrer; tanto instituciones privadas, gobiernos y asociaciones civiles deben desarrollar políticas públicas y marcos legales para permitir la aceptación de identidades digitales avanzadas que protejan la privacidad del usuario.

También es fundamental el apoyo de organismos internacionales y empresas privadas para proveer a los gobiernos la tecnologia que permita la creación de sistemas confiables para acreditación y verificación de identidad de ciudadanos y se ajusten a estándares internacionales que garanticen la gestión y resguardo correcto de la información que las soporta.

Published On: octubre 6, 2020 / Categories: Biometría, Transformación Digital /